No existen premisas para este día, me basta con su luz, con su calorcito tibio de primavera en gestacion. Me basta con saber que tu estás aqui todavia, de este lado de mis sentidos, en un espacio que resulta mas terrenal que el cielo, que no te afectan mis resoplos pensativos, ni mis divagues ideológicos. Que no te asustan mi miedo y mis angustias.
Seguramente le diga hoy, "buenos días" a la misma gente de siempre, que de seguro ni sospecha tiene de que es para mi, un día especial. Tan especial que estoy dispuesto a guardarlo en secreto para que nadie lo eche a perder, solo lo compartiré contigo en silencio y con una sonrisa cómplice pintada en nuestros rostros para siempre como esta primavera.
Hay veces en que no es conveniente planear, sacar cuentas, evaluar riesgos, tener un plan B o C que nos evite contingencias, para mi el presente se ha convertido en una cuenta atrás que se desliza entre agobios donde el aire se vuelve una nube densa, donde los ojos se revelan a quitar esa foto en secuencias del espacio que me rodea, todo se vuelve un destello o una sombra borrosa.
Tendremos el sol en nuestros corazones, guardaremos el mar en nuestros oídos, el viento penetrará en nuestro rostro y seguirá su viaje sin destino ni rumbo preconcebido.
La impronta será nuestra consigna, el tiempo nuestro inexorable verdugo, la pena el pago por todo concepto, la alegría el cambio chico por compartir la vida, los afectos el abrigo necesario para continuar
Seguramente le diga hoy, "buenos días" a la misma gente de siempre, que de seguro ni sospecha tiene de que es para mi, un día especial. Tan especial que estoy dispuesto a guardarlo en secreto para que nadie lo eche a perder, solo lo compartiré contigo en silencio y con una sonrisa cómplice pintada en nuestros rostros para siempre como esta primavera.
Hay veces en que no es conveniente planear, sacar cuentas, evaluar riesgos, tener un plan B o C que nos evite contingencias, para mi el presente se ha convertido en una cuenta atrás que se desliza entre agobios donde el aire se vuelve una nube densa, donde los ojos se revelan a quitar esa foto en secuencias del espacio que me rodea, todo se vuelve un destello o una sombra borrosa.
Tendremos el sol en nuestros corazones, guardaremos el mar en nuestros oídos, el viento penetrará en nuestro rostro y seguirá su viaje sin destino ni rumbo preconcebido.
La impronta será nuestra consigna, el tiempo nuestro inexorable verdugo, la pena el pago por todo concepto, la alegría el cambio chico por compartir la vida, los afectos el abrigo necesario para continuar
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