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domingo, 29 de noviembre de 2009

El paciente.......


El rostro en el espejo no ayuda mucho a su estado de ánimo, sus ojeras se agrandan y van ocupando un espacio cada vez más importante del rostro, entre tanto, el gris de sus ojos se va mutilando en aquella profundidad.
Por otra parte, aquellos huesudos pómulos sobresaliendo a sus mejillas de un color grisáceo no dejan que los finos labios ahora un tanto comprimidos y violáceos, dibujen mejor la mueca agria, de las palabras desdentadas que comenzó a espetar como esperando una reacción que de seguro no llegará nunca . Me contó a manera de confesión, que casi le desesperaba la pasividad que le invadía frente a la compasión que todos le mostraban al diagnosticar aquel estado que le consumía. Sus médicos no estimaban pertinente abrir opinión alguna sin tener antecedentes que fundamentaran su análisis.
No existían casos iguales en los libros de terapéutica, resultaban inverosímiles la cantidad de síntomas sobrepuestos y contradictorios que concluían en análisis y conjeturas con resultados algo inesperados sin definición alguna.
Eran interminables los interrogatorios que se le realizaban, y casi todas las preguntas se orientaban a posibles conductas de relativa moral. Siempre lo desconocido tiende a ser cuestionado como inmoral, por lo que si bien lo estaba tratando de tomar con mucha calma, tanta inquisición lo enervaba haciendo que su estado desmejorase notoriamente después de cada cuestionario. Ya no habían lágrimas ni ganas de llorar y eso para su saber y entender le resultaba mucho peor, pues le confirmaba interiormente la desidia que se había instalado en el corazón respecto a su estado.
Aquella mañana, parado frente a su fotografía instantánea de tamaño natural colgada en la pared del baño de su sala, no tuvo mejor idea que ignorar sus rasgos mas deteriorados y observar solamente lo que todavía existía en él sin haber desmejorado por ejemplo todo su pelo negro, el gris profundo y claro de sus ojos, sus tupidas cejas, sus orejas bien formadas y pequeñas y su increíble memoria fotográfica, que aunque invisible a sus ojos le resultaba muy perceptible pues describía con un detalle minucioso todos los momentos de su historia, aún la muy lejana en el tiempo.
Por un momento pensó que su enfermedad no era tan grave y que pronto sería solo una anécdota todo lo ocurrido, que por ahí, hasta gracia le haría recordar el desconcierto en el que tenia sumido a todos los catedráticos que se acercaban con la intención de dar una respuesta acertada sobre lo que le estaba afectando.
Luego de aquella reflexión, la nurse le intimó a que tomase la dosis recomendada de aquellas pastillas en su versión más multicolor, luego sobrevino el abismo: una, dos, tres, cuatro convulsiones, sus ojos se volvieron ingobernables y la oscuridad y el silencio le cayeron encima como una manta muy pesada e inamovible.
El doctor más joven del grupo que formaba parte del staff más calificado, diagnosticó muerte cerebral, el más viejo colega adujo que por la sintomatología a su real entender era un claro caso de catalepsia y mi veredicto fue simplemente "se aburrió de nuestra más absoluta ignorancia".
Me replicaron intempestivamente que podía estar escuchándonos a lo que les respondí; ojalá fuese así, de seguro no nos perdonaría su calvario. En ese instante su mirada se reincorporó a los ojos, sus labios casi azules para ese entonces, fruncieron una mueca atendible que tradujimos rápidamente en un "gracias por todo" y logrando erguirse de su postura, salió corriendo de la sala sin que la guardia pudiese detenerlo ni los porteros lograsen alcanzarle en su loca carrera.
Cada zancada le imprimía color a su piel, sonrosaba su rostro y fortalecía su delgado cuerpo, mientras nosotros boqui-abiertos nos mirábamos de reojo. Con aquella bata blanca sostenida por el cuello con una cinta atada con una moñita, se perdió en la muchedumbre de la ciudad aunque no pasó inadvertido para nadie, pues iba con el culo al aire, descalzo y riéndose a carcajadas.

Safe Creative #0911305033344

5 comentarios:

  1. Es espectacular como escribes amigo cuenta^^
    es un placer leerte!estas hecho todo un artista!!!
    me ha encantado la historia... la vida siempre estará por encima de la medicina .. y el amor.. por encima de todo.

    un gran abrazo!!!!lindos momentos^^

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  2. Cada zancada le imprimía color a su piel, sonrosaba su rostro y fortalecía su delgado cuerpo,///


    Escapó hacia la vida...
    Magnífico.
    Otra sorpresa en prosa.
    Es un lujo venir a tu blog.
    Un abrazo.

    SIL

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  3. vaya narracion , creo que salio huyendo , ainss y con el culo al aire joer bueno a ver a donde se ira, un abrazo.

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  4. Muy bueno!!!
    la imagen final es realmente delirante.

    Saludos montevideanos.Luis

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