Bastaría una respuesta para correr a tus brazos,
una sola palabra que termine con la espera,
bastaría un resoplo más del gigante sin rostro,
al que no le importan nuestras vidas y quimeras.
Faltaría más que un sol en este día,
o quizás una luna que cumpla los deseos,
una hoja en blanco donde escribir la historia,
una noche inmensa donde esconder los sueños.
Me falta tu sonrisa inquisidora,
tu optimismo en franca expectativa,
tus verdes ojos claros guiando mi retorno,
a la esquina del mundo donde habitas.
Allá voy de nuevo a tu presente,
a remendar agobios y algunas soledades,
a que zurzas mis heridas nuevamente
y consueles mi derrota sin rivales.
Lloraré en tu hombro como un niño,
buscaré en tu boca mas que un beso,
sumando cicatrices que nos duelen,
a partidas heridas de regreso.
Qué hermoso retornar.
ResponderEliminarMostrando fracasos, victorias, cicatrices y trofeos...
Un abrazo, un placer leerte!
Lo que nos dicta el corazón crea bellezas como esta tuya
ResponderEliminarBesos de colores creativos