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miércoles, 27 de mayo de 2009

Mis exilios


A Dios gracias tengo un perro,
una alcancía, un álbun de fotos,
un baúl de recuerdos,
un sitio tan mio como ajeno.

He sido un paria cuentapasos en redota
plasmando en soledades mis exilios,
dueño de mis propios callejones
y mis anchos espacios de baldíos.

Soy un remiendo mas raído que la tela,
la sorpresa en recaída de su asombro;
tengo una alegría con manchas indelebles
y una tristeza que no quiere doblegarse,
soy como un astuto sentimiento que al culparse
se perdona en su silencio,
sin saber a quien quejarse

Quiero lo que tengo por mi empeño,
tuve lo que otros me quitaron.
Supe del verbo derrumbarse
cuando apenas empezaba con mis años.

Tengo las respuestas que me dieron
aprendidas de memoria, sin ayuda
y no puedo creer que hoy existan
dos versiones de tan solo una duda

Mía es la desgracia de saber que los empates
son derrotas solapadas sin decencia
y que todos seriamos mejores
si tuviésemos un poco de vergüenza
A dios gracias tengo un perro
y un sitio tan mio como ajeno.





5 comentarios:

  1. He llegado para leerte de nuevo, pues en la anterior no tuve oportunidad de dejar mi paso por tus palabras.

    Expresas tu interior con estos versos, que dan tantísima información sobre tí mismo que te dan un trazo intimista...

    Tienes : " alegría indeleble frente a tristeza indoblegable ". Me quedo con la frase, si me lo permites, Cuentapasos!

    Yo los sigo... ahí estoy!

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  2. A dios gracias (o a quien proceda), tu inventario me llena de belleza, de palabras que saben a una vida llena de atardeceres. No te pierdas en el exilio, y que tu sitio se vaya haciendo más tuyo cada día.

    Y que nos enjuagues el alma con tus versos.

    Abrazos.

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  3. Tienes todo lo que guardas y aguardas todo lo que quieres.Esa es una buena manera de mantenerse dando pasos...
    Por cierto,,preciosos estos últimos.
    Un abrazo

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  4. Un poema lleno de intensos
    sentimientos que le da un
    especial colorido intimista
    con fondo de tristeza.

    Caminemos sin permitir que nos
    manchen la alegría.

    Un abrazo.

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